jueves, 25 de octubre de 2007

Cronología de los curas que actuaron en la capillita de paja y adobe del Señor de Renca
1745 - 1753: Pbro. D. Ignacio Fernández, era natural de San Luis; ejerció 8 años en Renca.
1753 - 1755: Padre Marcelino Ojeda de la Orden de San Agustín.
1755 - 1757: Padre Gómez de Araujo, dominico.
1758: Padre Fidel Vargas, también dominico.
1758 - 1761: Otra vez el Padre Marcelino Ojeda
Don Manuel de Alday y Aspée decimoctavo Obispo de Santiago de Chile, nacido en Concepción (Chile) en 1792, comienza en 1760 la visita pastoral a la Provincia de Cuyo.
1761: El Padre Fernández Vázquez, agustino.
1761 - 1764: El Padre Juan Vargas, dominico, hasta que se hace cargo el primer cura de la Parroquia de Renca.
En 1764 vuelve a la región de Cuyo el Obispo Manuel Aspée para decretar el ascenso de la Capilla del Señor de Renca a rango de Parroquia. Renca es una población importante, llena de aspiraciones, adelantada en el comercio, las industrias propias de la zona, en el desarrollo de la ganadería, en el intercambio, tiene algo más de un millar de habitantes.
La Parroquia de Renca y sus sacerdotes
1764 - 1810: El Rdo. Padre Juan Francisco Reguio Becerra logró el cariño de un pueblo por las virtudes que le acompañaban. Llevó su administración hasta lograr por si misma el establecimiento de la Parroquia y extender su generosidad a la feligresía necesitada.
1811 a 1824: P. D. Manuel Marcelino Becerra nació en San Luis en 1759. Dedicó sus actos a la instrucción del pueblo.Este sacerdote el 25 de Junio de 1810 recibe la visita del Prebendado Dr. Juan Justo Rodríguez quien puso en movimiento a él y al vecindario con sus autoridades civiles para que fundara una escuela. Una semana después la primera escuela de Renca abrió sus puertas con la asistencia del Preceptor Fernando Almeyda.Al padre Marcelino también le tocó despedir tres jóvenes valientes, Januario Luna, Basilio Busto y José Gregorio Franco que murieron en la mañana del 3 de febrero de 1813 en el Combate de San Lorenzo.
Aporte al Ejército de los Andes
Don Víctor Saá en su obra dice que San Luis colaboró con 4.000 soldados a la gesta sanmartiniana. Para gloria de San Luis y también orgullo de Renca eran muchos los bravos granaderos nacidos en estos pagos. Muchos inclinaron sus cabezas ante el crucifijo del bendito Señor de Renca antes de partir.
Los Granaderos
Renca, cuna de gobernadores, legisladores, estadistas, notables educadores, altos dignatarios, soldados descollantes, vivieron en el ambiente señorial de Renca, del ayer. Señalaremos primero a los más humildes, los más desamparados que dieron al país la fibra más prístina de sus elevados sentimientos, hombres que llevaban en la sangre en dogma de la emancipación. Regimiento de Granaderos a Caballos: Juanario Luna: Hijo de Crespín y Mónica Mayo, natural de Renca, estado soltero. José Gregorio Franco: Hijo de Eduardo y de María Liberata Fredes, estado soltero. Basilio Bustos: Hijo del granadero de éste y de Lucía Rodriguez, soltero, natural de Renca. Bien están en el bronce los nombres de aquellos Tres Granaderos. Sin embargo, bueno sería recordar asimismo a los otros hijos de Renca, que también empuñaron el sable libertador y altivos y gallardos formaron en los escuadrones del Gran Capitán. Nombremos entonces a José Martín Astoga y a su hermano Tomás; a Lorenza Bustos, que contempló el sacrificio de su hijo aquella mañana del 3 de Febrero, a Eugenio Franco, hermano de otro héroe; a Santos Fredes, a Juan Pascual Lucero, a Prudencio Olguín y a Domingo Ortiz, nacidos todos junto al rio Conlara. Y digamos por fin los nombres de Juan Rodriguez, de Tomás Ignacio Sosa y de Juan Ventura Romero, para que se enlacen al de Januario Luna, bajo el laurel de la gloria. Todos eran de Renca y todos fueron Granaderos de San Martín, peones, estancieros, curtidores, caperos, su temple era el mismo. Cuando los llamó la Patria marcharon con la misma congoja y la misma esperanza.
Los Gobernadores
Renca dio a la provincia de San Luis seis gobernadores: José de los Santos Ortiz: Doctor y Coronel Mayor. Nació en Renca el 1° de Noviembre de 1784, fue bautizado el 1° de Enero de 1785 en la Iglesia de Renca. Toribio Mendoza: Elegido gobernador el 8 de mayo de 1878. Eriberto Mendoza: Se hizo cargo el 8 de Mayo de 1884. Gerónimo Mendoza: Hermano de los anteriores, del mismo apellido y nacido con ellos en Renca. Lindor Quiroga: Nació en Renca el 7 de Octubre de 1841. Victor del Carmen Lucero: Nació en Renca el 21 de Julio de 1844, su padres Don Martín Lucero y Doña Dolores Aguilar.
1824 - 1830: Padre Fray Baltasar Ponce de León, dominico, amigo y colaborador del Gral. San Martín, se dedicó con entusiasmo a a docencia.
1830 - 1834: Fray Padre don Hilarión de Etura y Zeballos, nació en Córdoba del Tucumán en 1774, él abrió el Libro de Matrimonios.
Los malones
Renca a partir de 1832 se vió asechada constantemente por los indios Ranqueles, los malones se sucedieron uno tras otro buscando el saqueo de bienes y haciendas. El Padre Hilarión dejó este testimonio de como Renca fue saqueada en los libros parroquiales: “Entraron, saquearon el templo completamente, despedazaron el altar y no dejaron una sola cosa útil en él, y esto mismo practicaron en todas las casas de los vecinos. Sin embargo el 1º de Abril volví a Renca; y ya no hallé más en él que una aldea solitaria que lloraba la pérdida de sus hijos; el robo de las fortunas; el destrozo de las casas… y permanecí en Renca desde el 1º de Abril hasta el 8 de Julio en que tuve que volver a disparar dejando nuevamente lo que había adquirido por volver este día los indios a visitar el lugar, si haber modo como auxiliarnos, por no haber más gente en él, que yo y la familia del comandante Lucero”. El 8 de Julio los ranqueles vuelven a Renca (invaden también Paso Grande, Las Lagunas y Santa Bárbara) y Fray Etura anota: “Removieron al Señor del Calvario, destruyeron el material de los dos altares; el nicho del Señor y el Sagriaro”
1834 - 1852: Se hace cargo de la Parroquia el Padre Juan José Gil en un momento muy difícil. La parroquia está destruida, su feligresía amilanada.
El Padre Gil detalla que fue preciso llevar de nuestro Señor de Renca a las capillas del norte (probablemente a la capilla de Santa Bárbara) donde permaneció hasta el 2 de septiembre de 1836. En 1840 se repite la invasión ranquelina por lo que la Sagrada Imagen fue conducida nuevamente a Santa Bárbara, pero año siguiente volvió a su trono. Al Padre Gil le toca la reconstrucción de Renca en el sentido material y espiritual. El coronel Pablo Lucero (quien sería gobernador en 1841) defensor a ultranza de su tierra al llegar las tropas a su mando logra afianzar la confianza que su pueblo necesitaba. Lucero no sólo se ocupó de cuestiones políticas y militares, sino también preocupó a su espíritu la educación de los habitantes de la provincia además de su desarrollo intelectual. Para esos fines inauguró una escuela para la enseñanza de Gramática, siendo su primer director Don Mauricio Herrera, luego en Febrero de 1845, creó lo que se llamó la “Escuela de Latinidad”, eso sería lo que hoy se conoce como nivel secundario, el director fue el padre Tula. Este padre también legó la primitiva novena del Señor de Renca que por muchos años se rezó.
1852 - 1854: Fray Luis Joaquín Tula de la orden franciscana. Él contribuyó meritoriamente a la evolución cultural puntana.
1854: Padre Tomás Parodi, italiano, ocupó transitoriamente la parroquia.
1854 - 1871: Pbro. Padre Ángel Pacífico Bolla de nacionalidad italiana.
Crucifijo Puntano
El Padre Bolla dedicó especial atención a la Historia del Señor de Renca, investigó sus orígenes y encontró una imagen distinta del Cristo aparecida en Limache. A él le parecía que a la imagen le faltaba el Longino, aquel predestinado que encontró al milagroso Señor. Busca a un artesano, Manuel Paz, quién concreta la idea del Padre Bolla. Los primeros días de Julio de 1857, la creación humana, el Cristo del Espinillo con su hachador todo vestido de blanco comienza a morar en la parroquia. La nueva talla del Señor del Espinillo convive con el Señor de los montes del Limache. La nueva imagen del Espinillo conquista el corazón de la Parroquia y la de sus visitantes. Hay un milagro de acercamiento a lo autóctono de los montes puntanos, se hace que parece más nuestro y candoroso.

El Cristo del Espinillo, mandado a tallar por el Padre Angel Pacífico Bolla y realizado por el artesano Manuel Paz. (1857)
Imagen actual
El padre Bolla debe hacer frente a diversas vicisitudes: el cólera en 1867, los montoneras que asolan la región, la sequía que diezma los ganados y las mieses. Siguiendo la Historia Eclesiástica de Cuyo de Monseñor Verdaguer, actúan en Renca:
1871: Bruno Vergara quien tiene una breve estadía.
1872 - 1873: Pbro. Juan A. Alvarez, éste encuentra a la iglesia muy deteriorada por eso forma una comisión para la construcción de un templo nuevo. El proyecto se materializa y comienzan las obras en junio de 1874 presentándose algunos problemas.
1875 - 1876: Manuel Corral, español
1877: Pbro. Pablo Boy
1877 - 1879: Pbro. Julián Perea, español
Desde 1882 a 1899
Pbro. Padre José Marini, italiano, actúa en tres períodos en Renca: 1879-1881; 1883-1885; 1894-1899
1882: Pbro. Eduardo Ugarte, chileno
1882 - 1883: Miguel Spina, italiano
1885 - 1892: Pbro. Raimundo Pujador
1893: Pbro. Luis Prosseda
1893 - 1894: Pbro. Ramón Vazquez y Amor, este padre no fue muy querido.
En el año ’93 San Luis venía arrastrando una grave crisis política – financiera, se estaba incubando “La Revolución Radical y Popular” y en lo que atañe a la iglesia acumulaba también algunos problemas económicos.
1894: Padre José Marini, italiano.
1899-1911: Pbro. Sebastián Ramos, de origen hispano, es una persona activa y práctica, se propuso arreglar los deterioros y daños que el paso del tiempo produjo en el templo. En 1900 hizo construir la torre Poniente y en 1901 la torre Naciente, trabajo que estuvo a cargo de Don Lino Boscavolo.
Imagen antigua de la Iglesia de Renca (finales del siglo XX)
Imagen de principios del siglo XX de la Iglesia de Renca
1911 - 1912: Pbro. Felipe Brusatori, italiano, hizo construir la casa parroquial.

Iglesia de Renca con casa parroquial (actual)
1912 - 1934: Padre Juan Francisco Suarez quien dejó al Obispado de Cuyo varias obras de inspiración divina, entre ellas “Historia de la Parroquia de Renca” y “Esbozo Monográfico del Cristo de Renca” y “El Señor de Renca”. Además de dedicarse a la pluma se dedicó a la pala ya que se dio a la tarea de construir una capilla en Naschel, pueblo fundado en 1915, refacciona la capilla de Villa del Carmen y su parroquia, la del Señor de Renca en 1919.
1934 hasta 1948
Los padres franciscanos comienzan su apostolado en Renca el día 11 de Marzo del año 1934, esta orden de laboriosos padres sucesores de la prédica de San Francisco, aquel que había nacido en 1182 en Asís (Umbría), región central de Italia. Desde Marzo de 1834 se cristaliza el proyecto en la parroquia de Renca de aquellos padres de “Hábito marrón” al decir de los renqueños en aquellos tiempos. Ellos, gracias a sus manos afanosas, arreglaron, confortaron la casa parroquial. Hicieron jardines y un huerto con variedad de frutos, todos necesarios para el clero.
1935: Padre Cándido Alcaino, veneciano, tuvo en el Padre Arcángel Crespo un gran colaborador y sucesor; después se hicieron cargo conjuntamente; Juan Jose Angel, Antonio Pastor, Joaquín Mahiguez, Miguel Alonso Manted y Eduardo Vicent.
El Éxodo
En este año comienza el éxodo poblacional y los hijos naturales del Cristo del Espinillo se van, buscando nuevos horizontes. Renca, comunidad sin tren agoniza…; la traza del riel le es ajena. El giro ferroviario va cambiando su fisonomía y nacen nuevos pueblos; otros, comienzan un largo ostracismo vegetativo. Renca capital del Departamento Cahcabuco hasta 1934, fecha que asignó ese carácter al pueblo de Concarán, va diluyéndose en una sangría lenta pero progresiva, sólo su iglesia queda como parámetro de fe y esperanza. Ciertamente se produce la simbiosis: cuando Renca pierde vida, la parroquia cobra vida. Es visitada por más peregrinos cada vez, así el tronco bendito y querido, el Espinillo ya proclamado para siempre: ¡Señor de Renca! se prodiga en milagros esparciendo sus dones a los fieles promesantes. La iglesia muy engalanada por los padres franciscanos es un imán en la cultura popular, sus prodigo recorren caminos y en el devocionario de la fe en todos los puntos cardinales del país; llegan peregrinos al pie del espinillo celebrando el prodigio, también en esos años se pierde para siempre el crucifijo traido de Chile, se cree que el fuego desdibujó su entorno; siguiendo quizás el plan celestial que hiciera al igual que el árbol prodigioso, sucumbir en fuego eterno y milagroso. El 5 de Enero de 1936 el Padre Crespo dio posesión de la Parroquia al Padre Antonio Molto a quien le pesó el celibato y se alejó del templo. Después de dejar los hábitos en el altar del Cristo de Renca se casó y formó un sólido hogar cristiano.1938-1940: Se hace cargo en la sucesión de los franciscanos el Padre Ureña. Hace construir el Altar dedicado a la Inmaculada.1940-1945: Padre Nicolás Andrés quien deja un extenso escrito en el libro de actas que se encuentra en lA iglesia sobre la realización del la Capillade Renca, el Padre Etura, los años 1832, 34 y 1840; el Padre Felipe Brusatori y sus pares franciscanos. En el mes de Mayo de 1945, fallece el primer Obispo de Diócesis Monseñor Pedro D. Tibiletti y se hace cargo interinamente hasta 1947 Moseñor José Montero Vicario Capitular hasta que Monseñor Don Emilio A. Di Pasquo es nombrado como el nuevo Obispo de San Luis. Mientras tanto la misión pastoralde los franciscanos en la Parroquia de Renca la continua el Padre Pacífico Alberó Están, también como cura ayudante se desempeña el Padre Vincent.1948: El Padre Francisco Eduardo Vincent, el último encargado de la orden en ejercer en la Parroquia de Renca. Estos fueron años de desarraigos y desprendimientos en el suelo renqueño a falta de proyectos ciertos sus hijos fueron partiendo.1948-1960: Llega a Renca el 10 de Octubre y se hace cargo de la parroquia el Padre Manuel Rocha, español, a quién el Señor del Espinillo cura sus males, guía, acondiciona su espiritu para dar comienzo a una fructífera siembra en los material y espiritual. Ofrece misa frente el local de la escuela "Los Tres Granaderos" en 1949, reedifica nuevos templos, construye la nueva iglesia de Naschel, hace refaccionar la capilla en Villa del Carmen, inició los trabajos de la iglesia en la Punilla y en el Tala. Aún hoy se reza en Renca la Novena compuesta por el Padre Rocha. En 1954 finaliza la obra de embellecimiento, seguridad y cambio de techo del templo de Renca dejándola acorde a los adelantos de su época y a la temporalidad de santuario. El Padre Rocha a fines de 1960 se aleja para residir en Tilisarao hasta 1966. A pesar de que su salud estaba quebrantada tenía en mente conmemorar los 200 años de la Parroquia de Renca (recordar que 1764, la iglesia fue elevada a la categoría de parroquia cuando el cura Padre Regis Becerra). A pesar de sus penurias fisicas, desde Tilisarao comienza los preparativos. El día viernes 24 de abril (1964) comenzaron los cultos correspondientes al novenario a cargo del Rdo. P. franciscano Carlos Sáez. El sábado 2 de mayo, llega la banda de música de San Luis, el padre Rocha no se cansa de predicar y él también con los acordes populares de cantores y guitarras entona su:
Zamba del Señor de Renca
Corre el Conlara mansitoy habla bajito de lo que fuet rae en sus aguas la historiad e malón y gloria, de sangre y de fé
Y dibujan tus pincelesr ostros Ranqueles, al viento la crin m ientras el fuego devorar anchos de totora, carga su botín.
Villa de Renca benditap erla engarzada en la puntaS anto Señor del EspinoM arcan los destinos del fiel Concarán
Desde el Limache bonitob aja un burrito bañado de luzc ruza el Desaguaderop or el sendero e la Vera Cruz
Cristo nacido araucanoe n suelo puntano hechaste raízy te quedaste plantadoe namorado de nuestro San Luis
El día 3 de Mayo llegan las autoridades presididas por el Obispo Cafferata, y de Don Santiago Besso, Gobernador de la provincia; se descubre una placa recordatoria que es bendecida por el Obispo y luego una grandiosa procesión multitudinaria con la imagen alrededor de la antigua y cercada plaza. A partir del año 1966 la Parroquia de Renca se desmembró de la Parroquia de Tilisarao (16-1-66). El padre Pbro. Manual Rocha asume la parroquia el 10 de Octubre de 1948, y deja la parroquia el 31 de marzo de 1966.
El Padre Marcos Ochoa asume en abril de 1966, y realiza el primer bautismo el 23 de abril de 1966. Falleció el 25 de junio de 1995.
Hubo de años sin párroco fijo, ayudaron a la tarea los Padres Brito Omar, Picca David, Mariuchi Gustavo y Dilello Sergio.
El Padre Ricardo Arnaudo asume el 22 de diciembre de 1977 y el 24 de diciembre de 1997 realiza su primera misa.

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